LA LEY DE LA PRIMERA MENCIÓN

Entender la Biblia se basa en la idea de que cuando un tema se menciona por primera vez en las escrituras, se convierte en una pieza clave para interpretar futuras menciones.

La primera vez que se menciona la palabra amor es en Génesis 22:2. Entonces Dios dijo: “Toma ahora tu hijo, tu único, Isaac, a quien amas…”

Esto ocurrió cuando se le pidió a Abraham que sacrificara a su hijo Isaac en el Monte Moriá y es un símbolo de lo que Dios iba a hacer, en el mismo lugar, con su propio hijo al que amaba.

Dios estaba probando a Abraham para ver si le daba lo más preciado. Mientras que Adán desobedeció una petición relativamente pequeña, Abraham, el padre de la fe, obedeció la gran petición de Dios.

Cuando Isaac preguntó a su padre: “¿Dónde está el sacrificio? Abraham respondió: “Dios se proveerá de un sacrificio”. Eso es precisamente lo que hizo: Dios mismo, como hijo, fue el sacrificio.

¡Qué modelo de amor fue!

El amor es un sacrificio. El amor da. Y cuando damos nuestro amor a Dios, liberamos su amor ilimitado en nuestras vidas.

Juan 15:13 dice: “Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos”. Sin embargo, Jesús fue un paso más allá y dio su propia vida por nosotros, incluso antes de que fuéramos amigos suyos.

Aquí, Dios pone el listón del amor increíblemente alto. El amor no es una emoción sentimental o una sensación física, sino un compromiso profundo de Dios con nosotros, que requiere una respuesta igual de nosotros hacia Dios.

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