Quien ama mas

El amor no puede medirse en libras, kilos, yardas o metros. Sin embargo, Jesús nos ha dado una pista sobre cómo podemos medir el amor en Juan 15:13. “Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos”.

Lo que estaba diciendo es que la medida que se aplica al amor es lo que estás dispuesto a renunciar por él, en este caso su vida.

Como padre, si tuviera la opción de dar mi vida en lugar de mi hijo, no lo haría. Sería más fácil para mí morir que verlo morir. Sin embargo, Dios amó tanto al mundo que dio a su Hijo. (Juan 3:16)

Ten en cuenta que dice que Dios amó tanto al mundo. Estoy seguro de que Jesús también lo hizo, ya que también es Dios, pero cuando lees la Biblia, solo menciona que Jesús amaba a aquellos que Dios le dio.

¿Cómo podría Dios concebir un plan que involucrara la muerte de su Hijo, su único Hijo? Es imposible para mí comprenderlo. Tal fue su dolor, que en la cruz, Dios no podía soportar mirar a su hijo sufriendo. Esto parece ser un amor incluso más allá de lo que mencionó Jesús.

Pero la sabiduría de Dios fue que al hacer que un hijo sufriera y muriera, y resucitara, ganó millones de hijos (e hijas).

En Hebreos, escuchamos que “Dios—para quien y por medio de quien todo fue hecho—eligió llevar a muchos hijos a la gloria. Convenía a Dios que, mediante el sufrimiento, hiciera a Jesús un líder perfecto, apto para llevarlos a la salvación”. (Hebreos 2:10).

Ante tal amor, tal sacrificio, es comprensible que Dios se enoje con aquellos que desprecian y rechazan a su hijo, y aquellos que lo mofan y lo maldicen abiertamente.

Sin embargo, para aquellos que lo reciben, la Biblia dice “pero a todos los que creyeron en él y lo recibieron, les dio el derecho de llegar a ser hijos de Dios”. (Juan 1:12).

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